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Una barbacoa saludable: ¿qué vale la pena saber?
¿Pueden las barbacoas ser saludables y valiosas para la dieta diaria?
¡Estamos en plena temporada de vacaciones! El tiempo agradable y las altas temperaturas invitan a hacer barbacoas al aire libre. Sin embargo, vale la pena saber que una preparación inapropiada de alimentos a la parrilla puede resultar de poco valor para la salud. ¿Qué pautas debemos seguir a la hora de preparar estas comidas? ¿Qué hay que hacer para que estos deliciosos platos sean también seguros y estén libres de sustancias nocivas?
¿Cómo preparar los alimentos en una barbacoa?
Al parecer, se tiene la impresión de que la comida que hacemos en una barbacoa suele ser muy grasa y alta en calorías, y además se suele servir con una increíble cantidad de diversas salsas y aditivos que engordan. En realidad, la forma de preparar nuestra barbacoa depende solamente de nosotros mismos. Con unos métodos sencillos, podemos hacer que las comidas preparadas sean adecuadas para la dieta y no nos hagan ganar kilos excesivos. A continuación, presentamos algunos consejos valiosos para ayudarte a preparar las barbacoas de forma segura y saludable.
Lava y limpia bien la rejilla
Parece lógico, pero no todo el mundo lo hace. Eliminar los residuos de grasa y los restos de comida carbonizada en la barbacoa anterior es importante no solamente por razones higiénicas. Los restos de comida en la parrilla son una fuente de sustancias nocivas (incluyendo algunas que son cancerígenas). Asegurémonos de que el equipo esté siempre perfectamente limpio y bien preparado para la próxima comilona.
Utiliza productos seguros para encender la barbacoa
El material para encender barbacoas, igual que el propio carbón, solo debe incluir materiales naturales y ecológicos (por ejemplo, la madera). Esto asegurará que no haya riesgo de que se liberen alquitranes u otros compuestos tóxicos durante la combustión. Sobre todo, hay que evitar materiales multilaminados, combustibles, madera impregnada con productos químicos (por ejemplo, madera contrachapada o tablas barnizadas) y el papel impreso. Los vapores producidos durante la combustión son una fuente de diversas sustancias peligrosas para la salud, que además pueden cambiar el sabor de los alimentos. También vale la pena recordar que la barbacoa no se debe hacer directamente sobre el fuego, sino sobre las brasas, ya que de lo contrario los productos pueden carbonizarse rápidamente y «ser fuente» de muchos compuestos cancerígenos.
¿Directamente en la parrilla o mejor en una bandeja?
En cuanto a la opción depreparar alimentos directamente encima de la parrilla, es mejor cuando se trata de alimentos y productos que no tardan mucho tiempo en cocinarse. Esto es así porque entonces es poco probable que un exceso de grasa se derrita y caiga al fondo de la parrilla provocando la emisión de sustancias nocivas en contacto con el fuego. Sin embargo, la carne grasa y las verduras se preparan mucho mejor en bandejas de aluminio perforadas que aseguran la circulación libre del aire caliente. Además, evitan la fuga excesiva de esa grasa.
Prepara la carne y las verduras por tu cuenta
Muchas tiendas ofrecen productos preparados y marinados para la parrilla. Sin embargo, no hay garantía de que los ingredientes utilizados para la marinada no sean de mala calidad (por ejemplo, el aceite) y no se utilicen para enmascarar el sabor de la carne poco fresca. Lo mismo ocurre con las verduras. Por tanto, resulta mucho mejor comprar productos «sin tratar» y preparar las marinadas en casa.
La marinada casera no es nada difícil, basta con un poco de aceite de oliva y las especias favoritas que no debemos ahorrar al condimentar los platos de la barbacoa. Sobre todo, porque muchas de ellas son muy valiosas para el organismo. Las hierbas aromáticas como el estragón o la mejorana pueden sustituir fácilmente la sal; la pimienta negra y la pimienta de cayena ayudarán a estimular la digestión, mientras que la albahaca reducirá el riesgo de tener sensación de pesadez. Las especias tienen un efecto excepcionalmente positivo en las personas con un estómago delicado, propensas a reaccionar mal a la comida hecha a la parrilla. La carne debe dejarse reposar con el marinado durante un día, las verduras durante unas cuantas horas. Entonces los productos se impregnarán del sabor de la mezcla de especias preparada. Debemos recordar que la comida debe estar a temperatura ambiente antes de su colocación en la barbacoa: tendrá un sabor mejor y requerirá mucho menos tiempo en la parrilla.
El lado oscuro de la barbacoa: unas palabras sobre las sustancias nocivas
Aunque la carne pierde casi el 20% de su contenido de grasa en la barbacoa, este método de preparación de comida puede ser muy peligroso para la salud. El efecto de las altas temperaturas (superiores a 200°C) en las proteínas y grasas contenidas en los productos cárnicos favorece la formación de hidrocarburos aromáticos policíclicos (por ejemplo, el α-benzopireno) con propiedades cancerígenas comprobadas. Sin embargo, hay que recordar que el peligro para la salud depende de la cantidad consumida: una barbacoa esporádica no debería afectar negativamentenuestro organismo. Pero cuando la dieta durante las vacaciones se basa principalmente en comida hecha a la parrilla, entonces existe un gran riesgo para la salud, por ejemplo, puede deteriorarse el sistema cardiovascular, pueden alterarse los niveles de colesterol o se pueden producir anormalidades gastrointestinales.
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Elige sustitutos saludables para los platos más populares
Puede parecer difícil preparar sustitutos saludables de la comida más común hecha a la parrilla. En realidad, se necesita muy poco para preparar platos muy sabrosos y sin grasa, que seguramente cumplirán con las expectativas,en cuanto al sabor, de muchos aficionados a la comida.
- Las carnes grasas en forma de tocino o salchichas se pueden sustituir por brochetas de pollo o pavo que, acompañadas de verduras y frutas secas o frescas, deleitarán el paladar
- En lugar de mayonesa, vale la pena preparar una salsa tzatziki: basta con yogur natural, pepinos rallados, un poco de jugo de limón y sal, y pimienta para obtener una salsa deliciosa y refrescante para la carne
- En lugar de la salsa de tomate, mejor apostar por la mostaza, ya que contiene jaramago, que ayuda a la digestión y reduce la sensación de pesadez. La salsa de tomate llena de azúcar se puede sustituir por una salsa casera a base de verduras y especias aromáticas.
- El alcohol es una parte integral de la barbacoa, y las cervezas de sabores con mayor contenido de azúcar e hidratos de carbono se están convirtiendo en una bebida cada vez más común: no obstante, es mucho mejor preparar una limonada casera, que será igualmente refrescante
- Es difícil imaginarse una barbacoa sin pan, pero recordemos que es otra dosis de calorías. Por tanto, en lugar de esa rebanada extra de pan, es mejor elegir una ración adicional de verduras a la parrilla como rodajas de calabacín, pimientos, berenjenas, champiñones o tomates
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